Nos llena de orgullo lanzar el Fondo Café de la Mujer, una iniciativa de aporte a largo plazo creada para apoyar a mujeres caficultoras independientes en Colombia. A partir de ahora, el 5% de cada compra de nuestra serie Café de la Mujer en Colombia y EE. UU. irá directamente al fondo. Cada trimestre invertiremos en un proyecto liderado por una de nuestras caficultoras aliadas. Esta es nuestra manera de seguir fortaleciendo las relaciones que hemos construido y de respaldar a las mujeres con apoyo práctico para mejorar y hacer crecer su producción, sus fincas y sus medios de vida.
Algunas de nuestras caficultoras aliadas
Nos llena de orgullo lanzar el Fondo Café de la Mujer, una iniciativa de aporte a largo plazo creada para apoyar a mujeres caficultoras independientes en Colombia. A partir de ahora, el 5% de cada compra de nuestra serie Café de la Mujer en Colombia y EE. UU. irá directamente al fondo. Cada trimestre invertiremos en un proyecto liderado por una de nuestras caficultoras aliadas. Esta es nuestra manera de seguir fortaleciendo las relaciones que hemos construido y de respaldar a las mujeres con apoyo práctico para mejorar y hacer crecer su producción, sus fincas y sus medios de vida.
Creamos este fondo porque las mujeres sostienen gran parte del sector cafetero colombiano, pero todavía enfrentan barreras estructurales. Hacen muchísima del trabajo (hasta el 75% de las labores en campo y el 70% del trabajo poscosecha), pero solo alrededor del 30% está formalmente registrada como caficultora. Esa brecha tiene que ver con el acceso a la tierra, al crédito y con normas culturales de larga data que dificultan el reconocimiento y el liderazgo.
Las fincas administradas por mujeres enfrentan una brecha de productividad cercana al 24% frente a fincas similares administradas por hombres, y en el agro las mujeres ganan alrededor de 82 centavos por cada peso que gana un hombre. Aunque estas brechas persisten, el beneficio de cerrarlas es enorme. Según hallazgos de la FAO en 2023, mejorar la equidad en los sistemas agroalimentarios podría aumentar el PIB global en casi un billón de dólares y mejorar la seguridad alimentaria de más de 45 millones de personas. Para nosotros, esto no es caridad: es una inversión de largo plazo en quienes están detrás de algunos de los mejores cafés de Colombia.
El apoyo a los proyectos seleccionados está pensado para ser útil desde el primer momento, ya sea por medio de reembolsos o a través de entrega directa de materiales, capacitaciones, infraestructura y servicios estratégicos. En pocas palabras, herramientas que ayudan a quitar cuellos de botella y a que las caficultoras sigan avanzando.
Para lanzar el fondo, establecimos un proceso claro para elegir a las productoras que recibirán financiación. Nuestro equipo de sostenibilidad priorizará a mujeres que ya nos suministran volúmenes y calidades consistentes, así como a aquellas para quienes un apoyo específico pueda generar un impacto significativo. Cada tres meses revisaremos las ventas de Café de la Mujer para confirmar el presupuesto disponible. A partir de ahí, co-crearemos cada proyecto directamente con la caficultora, entendiendo primero sus retos actuales y definiendo pasos concretos que se ajusten a las áreas de enfoque del fondo. La meta es lograr mejoras en el corto plazo y construir resiliencia para el futuro.
Para aplicar, los proyectos deben alinearse con al menos dos áreas dentro de tres enfoques estratégicos:
1. Mejora de medios de vida
Por ejemplo: equipos a nivel de finca como camas de secado y sistemas de almacenamiento, diversificación de ingresos, o apoyo en finanzas, comercialización y conectividad digital.
2. Fortalecimiento de capacidades y liderazgo
Por ejemplo: formación en agricultura sostenible, calidad y poscosecha, además de desarrollo de liderazgo y emprendimiento, con acceso a redes y mayor visibilidad.
3. Conservación del territorio y resiliencia climática
Por ejemplo: prácticas de agricultura regenerativa, protección del agua, restauración de ecosistemas y adaptación al cambio climático.
Con esta iniciativa queremos aprender y mejorar sobre la marcha. Vamos a medir si las personas eligen activamente cafés de Café de la Mujer cuando esa información es clara, si el fondo se convierte en un diferenciador importante para Devoción y si la inversión sostenida fortalece aún más nuestras relaciones con comunidades de caficultoras. Nos comprometemos a publicar un informe anual y a mantener un tablero interno para que el avance sea transparente y verificable.
Estamos muy emocionados por lanzar este fondo y por los proyectos que hará posibles. Y, sobre todo, está construido con las productoras, no para ellas. Este es un paso hacia un sector cafetero más equitativo en Colombia, y estamos comprometidos a hacerlo crecer en el largo plazo.